EL partido continuaba, al minuto 85 el arquero chiva, Luis Michel hizo una atajada increíble, casi milagrosa evitando así el empate...
Michel. –árbitro!! Ya toque el final!!!
Árbitro. –Faltan 5 minutos hijo
Michel. (Hablándole a sus jugadores) –Váyanse de aquí!
Reynoso. –Despeja!! (A lo que Mich. Obedeció y él balón cayó justo a los pies de Arellano)
Pato. –Córrele!! (Las defensas del equipo contrario hacían lo posible para tener ese balón, en los últimos minutos, solo necesitaban un gol, y estaban dispuestos a encontrarlo)
Venado. –Omar!! (Mirando a Arellano) –Ten cuidado atrás!!
Lupitha. (Casi se le salía el corazón por la boca) –Vamos Omaaar tu puedes!!!!
Carla. –Hay Dios…. Que nervioooss!!!
Arellano corrió a toda la velocidad hacia la portería, se deshizo fácilmente de los defensas contrarios, solo faltaba una cosa, superar al portero… tan solo en una fracción de segundo, clavó la pelota en la esquina derecha de la portería, sin que nadie pudiera evitarlo, el omnilife estalló de emoción a solo 3 minutos de que culmine el partido… después del tiro, Omar calló de rodillas a la portería, sus compañeros de inmediato corrieron a felicitarlo…
Era inútil que el árbitro agregara minutos al partido, y exactamente a los 45 del segundo tiempo tocó el final del encuentro… las chivas… eran campeones del clausura 2011.
Después de la ceremonia… la celebración y la entrega de la copa Omar prácticamente “huyó” del festejo…
Omar. –Diana!!
Diana. (De inmediato corrió hacia él) –Hola campeón!
Omar. –No puedo creerlo! Esto es lo mejor que me ha pasado, el gol… el estadio… el campeonato… y tú estás aquí conmigo (La abrazaba cada vez más fuerte)
Diana. –Sabía que ibas a ser campeón, estaba segura… completamente. Por cierto… gracias por el gol… estuvo increíble.
Omar. –Ya tenía que quedar claro que a quien quiero es a ti… (La besó de tal manera que por un momento Diana olvidó como respirar) –Te amo… (Le susurro al oído)
Diana. –Yo te amo más…
Omar. –Ven… vamos a festejar (la tomó de la mano y se la llevó con los demás)
Michel. –La fiesta está a todo lo que da, el estadio está como loco
Mari. –Te lo mereces… eres un campeón (Decía al momento en que llegaban los papás de Mich)
Papá. –Hola hijo! Muchas felicidades! (Lo abrazó)
Mamá. –Hola Mari, que bueno verte por aquí.
Mari. –Hola! Buenas tardes (Sonreía tímida mientras Mich. La abrazaba de la cintura acercándola a su lado)
Vergara. –¡Felicidades! (Le dio un abrazo) –Es un honor tener al mejor portero en el equipo. (Les decía a sus papás) –Su carrera va a despegar enormemente y va a dejar el nombre de México muy en alto en el extranjero. (Palabras que no pasaron desapercibidas para Mari aunque no dijo nada para no arruinar el momento de Michel)
Así continuó la tarde… la noche y la madrugada del fin de semana… Guadalajara estaba de fiesta, no solo Guadalajara, todo México se rendía a los pies del mejor equipo de futbol.
Pero la fiesta no era eterna, y la felicidad no podía durar mucho tiempo….
Michel. –árbitro!! Ya toque el final!!!
Árbitro. –Faltan 5 minutos hijo
Michel. (Hablándole a sus jugadores) –Váyanse de aquí!
Reynoso. –Despeja!! (A lo que Mich. Obedeció y él balón cayó justo a los pies de Arellano)
Pato. –Córrele!! (Las defensas del equipo contrario hacían lo posible para tener ese balón, en los últimos minutos, solo necesitaban un gol, y estaban dispuestos a encontrarlo)
Venado. –Omar!! (Mirando a Arellano) –Ten cuidado atrás!!
Lupitha. (Casi se le salía el corazón por la boca) –Vamos Omaaar tu puedes!!!!
Carla. –Hay Dios…. Que nervioooss!!!
Arellano corrió a toda la velocidad hacia la portería, se deshizo fácilmente de los defensas contrarios, solo faltaba una cosa, superar al portero… tan solo en una fracción de segundo, clavó la pelota en la esquina derecha de la portería, sin que nadie pudiera evitarlo, el omnilife estalló de emoción a solo 3 minutos de que culmine el partido… después del tiro, Omar calló de rodillas a la portería, sus compañeros de inmediato corrieron a felicitarlo…
Era inútil que el árbitro agregara minutos al partido, y exactamente a los 45 del segundo tiempo tocó el final del encuentro… las chivas… eran campeones del clausura 2011.
Después de la ceremonia… la celebración y la entrega de la copa Omar prácticamente “huyó” del festejo…
Omar. –Diana!!
Diana. (De inmediato corrió hacia él) –Hola campeón!
Omar. –No puedo creerlo! Esto es lo mejor que me ha pasado, el gol… el estadio… el campeonato… y tú estás aquí conmigo (La abrazaba cada vez más fuerte)
Diana. –Sabía que ibas a ser campeón, estaba segura… completamente. Por cierto… gracias por el gol… estuvo increíble.
Omar. –Ya tenía que quedar claro que a quien quiero es a ti… (La besó de tal manera que por un momento Diana olvidó como respirar) –Te amo… (Le susurro al oído)
Diana. –Yo te amo más…
Omar. –Ven… vamos a festejar (la tomó de la mano y se la llevó con los demás)
Michel. –La fiesta está a todo lo que da, el estadio está como loco
Mari. –Te lo mereces… eres un campeón (Decía al momento en que llegaban los papás de Mich)
Papá. –Hola hijo! Muchas felicidades! (Lo abrazó)
Mamá. –Hola Mari, que bueno verte por aquí.
Mari. –Hola! Buenas tardes (Sonreía tímida mientras Mich. La abrazaba de la cintura acercándola a su lado)
Vergara. –¡Felicidades! (Le dio un abrazo) –Es un honor tener al mejor portero en el equipo. (Les decía a sus papás) –Su carrera va a despegar enormemente y va a dejar el nombre de México muy en alto en el extranjero. (Palabras que no pasaron desapercibidas para Mari aunque no dijo nada para no arruinar el momento de Michel)
Así continuó la tarde… la noche y la madrugada del fin de semana… Guadalajara estaba de fiesta, no solo Guadalajara, todo México se rendía a los pies del mejor equipo de futbol.
Pero la fiesta no era eterna, y la felicidad no podía durar mucho tiempo….