Los Mochis, Sin.- Con el firme propósito de compartir y agradecer lo que ha recibido a lo largo de su carrera como profesional, el futbolista mochitense Omar Bravo Tordecillas estuvo de visita en su tierra, y aprovechó la ocasión para disfrutar de un día completo con pequeños de distintos sectores de bajos recursos de la ciudad, regalando, -además de los consabidos autógrafos-, comida juguetes y dulces.
Abordado por los micrófonos de Línea Directa, visiblemente cansado pero aún sonriente, el popular delantero se dijo contento de poder compartir estos momentos con su gente:
“Estoy muy agradecido con Dios porque me ha dado mucho, y es un poquito de lo que yo le puedo regresar a la gente que no tiene los recursos o la solvencia como para poder estar en un lugar como este, comprarse un juguete, poder tener una buena comida; entonces esa es la intención, aunque es a ciertos grupos de niños, nada más, -400 niños-; creo que se la pasaron muy bien y que no podrán olvidar este día. La idea fue congregar a quienes realmente lo necesitan: de muy, muy bajos recursos; espero poder hacerlo año con año, pues estoy con la idea de retomarlo, hacerlo por convicción: no busco el apoyo de ninguna autoridad ni de ningún grupo; lo hago porque me gusta, porque sé lo que es ser un niño y no tener con qué jugar”.
Luego de la agotadora jornada, Omar habló del nuevo compromiso al dejar atrás el ciclo como jugador del Rebaño Sagrado, y cambiar de piel al futbol estadounidense:
“Es un nuevo proyecto de vida, en mi carrera; tengo 30 años y me siento pleno todavía, con mucho que dar: me voy a los Estados Unidos a un grupo que me invita a integrarme para lo que ellos quieren: ser un equipo protagonista; es el Kansas City y voy con la firme idea también de hacerlo y de buscar ganar todo”.
Al ser cuestionado respecto a la evolución que ha significado el haber jugado en Europa, en el futbol mexicano y emigrar de nuevo, ahora a la Unión Americana, el destacado deportista asegura que nada lo asusta:
“Después de vivir lo que viví en Coruña, la verdad he perdido la capacidad de asombro; no me mueve algo que diga ‘no me voy, o voy a extrañar tal cosa’; la verdad Mèxico es muy lindo, pero por conveniencia, por situaciones personales, por proyectos profesionales he tomado esta decisión; por supuesto que tenía la posibilidad de jugar en Mèxico; no lo he decidido así en este momento, pero luego veremos si hay la posibilidad de volver o no. En Chivas cerré un ciclo; ya está, la vida sigue; hice lo que tenía que hacer, no me guardé nada y hasta ahí quedó. A Chivas le sigo teniendo el mismo amor que cuando inicié; soy un agradecido y ellos también; todo terminó muy bien: Jorge, Angélica; el agradecimiento es grande, como ellos ya lo saben personalmente, entonces no pasa nada”.
Bravo se dijo más maduro deportiva y emocionalmente luego de cada experiencia que le ha otorgado el futbol profesional:
“Cada etapa forja tu carácter, todo es un aprendizaje; es un dicho muy popular, pero emocionalmente me siento bien; gracias a Dios tengo salud y mi familia està muy bien. Tengo mi propia familia, y eso es con lo que yo me quedo; profesionalmente aprendes sobre todo de las derrotas, porque cuando estàs ganando, sientes que estàs sobre una burbuja; lo digo personalmente. Cuando las cosas no están bien es cuando màs aprendes: profesional y personalmente”.
Será el día 21 de enero cuando Omar Bravo se incorpore oficialmente a la pretemporada del Sporting Kansas City, y será entonces cuando se haga su presentación oficial ante los medios, y se conozca el número con el que jugará en una liga que sin duda, va ascendiendo en cuanto a nivel se refiere, como lo es la Major League Soccer –LMS-.
Mención aparte merece el hecho de que las casi cuatro centenas de niños que asistieron al conocido centro de diversiones donde se llevó a cabo el evento pertenecen a colonias como Las Malvinas, Siglo XXI, Escuela Miguel Hidalgo, Oratorio Don Bosco, Ejidos Primero y Cinco de Mayo, así como del Programa de Atenciòn a Menores y Adolescentes en Riesgo –Pamar- del Sistema DIF.
Abordado por los micrófonos de Línea Directa, visiblemente cansado pero aún sonriente, el popular delantero se dijo contento de poder compartir estos momentos con su gente:
“Estoy muy agradecido con Dios porque me ha dado mucho, y es un poquito de lo que yo le puedo regresar a la gente que no tiene los recursos o la solvencia como para poder estar en un lugar como este, comprarse un juguete, poder tener una buena comida; entonces esa es la intención, aunque es a ciertos grupos de niños, nada más, -400 niños-; creo que se la pasaron muy bien y que no podrán olvidar este día. La idea fue congregar a quienes realmente lo necesitan: de muy, muy bajos recursos; espero poder hacerlo año con año, pues estoy con la idea de retomarlo, hacerlo por convicción: no busco el apoyo de ninguna autoridad ni de ningún grupo; lo hago porque me gusta, porque sé lo que es ser un niño y no tener con qué jugar”.
Luego de la agotadora jornada, Omar habló del nuevo compromiso al dejar atrás el ciclo como jugador del Rebaño Sagrado, y cambiar de piel al futbol estadounidense:
“Es un nuevo proyecto de vida, en mi carrera; tengo 30 años y me siento pleno todavía, con mucho que dar: me voy a los Estados Unidos a un grupo que me invita a integrarme para lo que ellos quieren: ser un equipo protagonista; es el Kansas City y voy con la firme idea también de hacerlo y de buscar ganar todo”.
Al ser cuestionado respecto a la evolución que ha significado el haber jugado en Europa, en el futbol mexicano y emigrar de nuevo, ahora a la Unión Americana, el destacado deportista asegura que nada lo asusta:
“Después de vivir lo que viví en Coruña, la verdad he perdido la capacidad de asombro; no me mueve algo que diga ‘no me voy, o voy a extrañar tal cosa’; la verdad Mèxico es muy lindo, pero por conveniencia, por situaciones personales, por proyectos profesionales he tomado esta decisión; por supuesto que tenía la posibilidad de jugar en Mèxico; no lo he decidido así en este momento, pero luego veremos si hay la posibilidad de volver o no. En Chivas cerré un ciclo; ya está, la vida sigue; hice lo que tenía que hacer, no me guardé nada y hasta ahí quedó. A Chivas le sigo teniendo el mismo amor que cuando inicié; soy un agradecido y ellos también; todo terminó muy bien: Jorge, Angélica; el agradecimiento es grande, como ellos ya lo saben personalmente, entonces no pasa nada”.
Bravo se dijo más maduro deportiva y emocionalmente luego de cada experiencia que le ha otorgado el futbol profesional:
“Cada etapa forja tu carácter, todo es un aprendizaje; es un dicho muy popular, pero emocionalmente me siento bien; gracias a Dios tengo salud y mi familia està muy bien. Tengo mi propia familia, y eso es con lo que yo me quedo; profesionalmente aprendes sobre todo de las derrotas, porque cuando estàs ganando, sientes que estàs sobre una burbuja; lo digo personalmente. Cuando las cosas no están bien es cuando màs aprendes: profesional y personalmente”.
Será el día 21 de enero cuando Omar Bravo se incorpore oficialmente a la pretemporada del Sporting Kansas City, y será entonces cuando se haga su presentación oficial ante los medios, y se conozca el número con el que jugará en una liga que sin duda, va ascendiendo en cuanto a nivel se refiere, como lo es la Major League Soccer –LMS-.
Mención aparte merece el hecho de que las casi cuatro centenas de niños que asistieron al conocido centro de diversiones donde se llevó a cabo el evento pertenecen a colonias como Las Malvinas, Siglo XXI, Escuela Miguel Hidalgo, Oratorio Don Bosco, Ejidos Primero y Cinco de Mayo, así como del Programa de Atenciòn a Menores y Adolescentes en Riesgo –Pamar- del Sistema DIF.